divendres, 13 de setembre del 2013

El séptimo papiro



Ediciones Duomo nos invita a una aventura increíble, apasionante, donde el pasado y el presente confluyen, una historia que quema en manos de todo lector. 

No conocía la obra de Wilburn Smith, pero después de leer El séptimo papiro he de confesar que he empezado a indagar sobre su serie de novelas ambientadas en Egipto, esta es la segunda obra de la serie que empezó con la novela “Río sagrado”, publicada por Duomo, y a la cual se hace frecuente referencia, pero no es imprescindible haberlo leído para poder vivir intensamente de esta gran novela histórica.

El autor describe los parajes de Egipto y Etiopia como si de un lienzo se tratara, su dinamismo se refleja en un trazo continuo de descubrimientos, el lector sufrirá el calor del desierto, el aroma de las especias, y la majestuosidad de la visión del gran Río Azul, el Nilo.

La historia empieza situando al lector en Egipto donde un matrimonio trabaja descifrando unos papiros encontrados en una excavación anterior, por la noche mientras trabajan son atacador, él muere y ella logra sobrevivir, toda la documentación ha desaparecido, pero el último aliento de su marido la envía a Londres en busca de un nuevo compañero de trabajo.

En el corazón de África se encuentra escondida la tumba del faraón Mamosis y su tesoro, protegido por los secretos de quien fue su escriba Taita, este se consideraba un maestro en el arte de la adivinanza y el juego de palabras. Hoy, tres mil años después se encontrará con dos jugadores que lo apostaran todo por descifrar sus juegos y acertijos, y así poder postrarse ante Mamosis.

Royan Al Simma, dejará su trabajo en el museo y en el Departamento de Antigüedades de El Cairo y se reunirá con el aristocrático egiptólogo Nicholas Quenton-Harper, juntos comenzaran una búsqueda que los llevará a conocer personajes muy interesantes. Además no solo se tendrán que enfrentar a los peligros del pasado, sino que en el presente las dificultades también harán acto de presencia bajo reductos de corrupción y dinero.

El autor recrea el ambiente del territorio con sus conflictos armados, las diferentes ramas de las religiones que en aquellas bastas tierras coexisten, creando un ambiente nada superficial y dando puntos de apoyo a la aparición de personajes que serán más de lo que parecen y demostraran que hay veces que la finalidad merece sacrificios de sangre.

¿Conseguirán descubrir la tumba perdida? ¿Será este el mayor tesoro que se esconde en su aventura?

Una nota peculiar es el hecho que el propio autor se introduce en la novela con su nombre como escritor del libro anterior, un hecho que regala dinamismo a la novela, todo lector acaba identificándose que un personaje en concreto, que mejor oportunidad para un escritor que poder formar parte de su propia historia.

Una novela que cerrada esconde un gran secreto a descubrir, abierta invita a la aventura y su final es majestuoso. Una serie de la que no pienso perderme un título y recomiendo como imprescindible para los amantes de la historia, tanto pasada como presente y futura, ya que no sabemos que nos depararan sus siguientes títulos.